Mariló CANCER DE MAMAS

Las aplicaciones del tatuaje reparador serían tatuajes sobre cicatrices post-cirugía, quemaduras, abdominoplastias, mamoplastias, (por aumento, reducción e transexualidad), traumatismos, etc…..

Un criterio a seguir, es engañar a la vista creando tatuajes adaptados a la anatomía, que disimulen o tapen de algún modo las marcas antiestéticas que resultan incómodas para el cliente. En el caso de areola-pezón, intentamos imitar uno realista, creando una sensación de 3d que a nivel visual parezca una mama natural.

Para poder realizar este tipo de trabajos, es muy importante tener años de experiencia y buena técnica en tatuar, ya que la piel a tratar no es piel sana y normal. En caso de no tener buena técnica, se puede dañar el tejido de forma irreversible ; ocasionando un problema antiestético más grave que el problema inicial, por el que acudió a hacerse un tatuaje.

Y en la mayoría de los casos, ocasionar o agravar un problema psicológico.

En el caso de areola-pezón, es especialmente importante chequear al tatuador : Lo primero tener en cuenta es, por supuesto, seguridad e higiene. Segundo, que tenga varios años de experiencia en tatuajes realistas. Estudia e investiga los tatuajes realistas por el profesional. Asegúrese de que sean fotos suyas, y no tomadas de otros artistas. Tercero, tome contacto con el profesional y que le asesore sobre el trabajo que se puede realizar antes de tomar una decisión. Debe sentirse cómoda con él y confiar en su trabajo.

Las personas cuando llegan al tatuador a hacerse la areola-pezón después de mastectomía, ponen con ello un punto y final a todo el proceso de reconstrucción, son por lo general mujeres, que han pasado por un proceso de 4 a 8 años desde que fueron diagnosticadas de cáncer de mama. Han estado sometidas a quimioterapia, cirugía mastectomía, radioterapia, hormonoterapia, cirugía, expansor, cirugía reconstrucción con implantes de prótesis u otros…etc. Con lo cual los tatuadores en estos casos nos encontramos con pieles extremadamente sensibles, que precisan muy buena técnica y cautela. Por otro lado, es una gran responsabilidad para el tatuador, ya que en caso de realizar un mal tatuaje no se debe aplicar láser, y en caso de arreglo o cover (tapado), no podemos castigar la piel y estamos muy limitados.

Por esta Razón en 2013, inicié un proyecto a través de UNTAP, para difundir, este tipo de tatuaje, y dar a tatuadores profesionales con más de dos años de experiencia y conocimientos artísticos, una formación más específica en tatuaje de areolas-pezón a través de seminarios. Estos seminarios, cuentan con la participación de docentes de Psicología, experimentados en tratamiento por cáncer de mamas.

 

 

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